Este último lo deben tener todos los vehículos que transiten por el país, pues cubre los daños causados a las personas producto de accidentes de tránsito, desde lesiones leves hasta gastos funerarios, todo en el marco de los montos establecidos por ley.
Las compañías aseguradoras ofrecen seguros de automóviles que entran a cubrir otra serie de riesgos asociados a los automotores.
Al adquirir algún seguro de este tipo, por medio de un contrato voluntario y haciendo un aporte mensual o anual, la persona puede tener la certeza de que en caso de presentarse algún imprevisto de tránsito, la compañía responderá. La Federación de Aseguradores Colombianos (Fasecolda) afirma que estas pólizas cubren daños materiales por accidentes de tránsito, hurto del carro o bienes de terceros. También los asociados a la muerte o lesiones ocasionadas a terceros por un accidente de tránsito donde el asegurado resulte responsable.
El parque automotor asegurado en Colombia se distribuye de la siguiente manera: 79% vehículos livianos, 10% vehículos pesados y 11% motocicletas.
De acuerdo con Fasecolda, a marzo de 2019, se registraron $863.096 millones en primas emitidas, es decir, los valores cobrados por las compañías de seguros sobre riesgos asumidos. Respecto a los siniestros, el gremio registró $485.194 millones asumidos por las compañías para pagar indemnización al asegurado.
Fasecolda afirmó que de 8,2 millones de vehículos que tienen el Seguro Obligatorio de Accidentes Tránsito (Soat), tan solo 2,9 millones cuentan con seguro voluntario de automóviles. Al respecto, el Presidente de la Asociación Nacional de Movilidad Sostenible (Andemos), aseguró: “me parece indispensable tener estos seguros, sin embargo, deben haber tasas más razonables porque acá, en Colombia, son muy altas. Las aseguradoras deberían cambiar la estrategia, bajar la tarifa y aumentar la cobertura, de este modo podrían triplicar sus afiliados”.